Tanques de almacenamiento: tipos, usos y recomendaciones

Los tanques de almacenamiento son esenciales en la infraestructura industrial y comercial, asegurando el resguardo seguro de las sustancias.

Los tanques de almacenamiento desempeñan un papel fundamental en diversos sectores, desde la industria química hasta la alimentaria y petrolera. 

Permiten el almacenamiento seguro y eficiente de líquidos o productos químicos, contribuyendo a la preservación del medio ambiente y la seguridad de las instalaciones. 

Un aliado versátil en múltiples industrias

Los tanques de almacenamiento son recipientes de gran capacidad, diseñados para almacenar una amplia variedad de líquidos y productos, desde agua potable y productos químicos, hasta combustibles y alimentos. 

Fabricados con diversos materiales, estos tanques brindan soluciones versátiles y confiables para las necesidades de almacenamiento de diferentes industrias, como la alimentaria, la química, la farmacéutica, la agrícola y muchas más.

Además, no son solo recipientes pasivos. Son elementos clave en la cadena de suministro, asegurando la integridad y calidad de los productos almacenados, optimizando procesos y reduciendo costos. 

A la vez que contribuyen a la protección del medio ambiente al minimizar derrames y fugas, ofreciendo soluciones duraderas y sostenibles.

Tipos de tanques de almacenamiento

Existen diversos tipos de tanques de almacenamiento, a continuación te invitamos a sumergirte en este universo de soluciones:

Clasificación por forma

• Cilíndricos. Son los más comunes, ofrecen una gran capacidad de almacenamiento y una distribución uniforme del peso.
• Rectangulares. Optimizan el espacio disponible, ideales para áreas con limitaciones de espacio.
• Horizontales. Facilitan el llenado y vaciado del producto almacenado.
• Verticales. Ocupan menos espacio en el suelo, ideales para lugares con altura limitada.

Clasificación por función

Tanques isotérmicos o con aislamiento.

Juegan un papel crucial en el almacenamiento seguro y eficiente de líquidos o productos químicos que requieren mantener una temperatura estable y adecuada para su conservación.

Tanques criogénicos.

Se utilizan para almacenar líquidos a temperaturas extremadamente bajas, por ejemplo, en la industria del gas natural licuado (GNL) y en la aeroespacial, donde se requiere mantener los fluidos en un estado criogénico para su transporte y uso posterior.

Están construidos con materiales altamente aislantes para asegurar que las temperaturas se mantengan estables y los líquidos se conserven en condiciones óptimas.

Tanques de presión.

Son útiles para resguardar sustancias volátiles que requieren mantenerse a una presión específica y constante. Se utilizan en la industria química y petrolera para almacenar gases y líquidos a presiones superiores a la atmosférica. Deben cumplir con estrictas normativas de seguridad y resistencia para evitar posibles fugas o explosiones.

La selección del material y el diseño de estos tanques son fundamentales para garantizar su eficiencia y seguridad en las operaciones.

Tanques de doble pared.

Son estructuras que constan de dos capas de paredes independientes con un espacio intermedio que actúa como una barrera adicional de contención. Esta configuración proporciona una protección adicional contra fugas y derrames, reduciendo el riesgo de contaminación ambiental y daños a la salud.

Son ideales para almacenar sustancias peligrosas o corrosivas, cuando la seguridad y la prevención de fugas son prioritarias.

Clasificación por tipo de material

• Metálicos. Fabricados en acero inoxidable o acero al carbono, ofrecen alta resistencia y durabilidad.
• De plástico. Livianos, resistentes a la corrosión y económicos, ideales para almacenar productos no corrosivos.
• De fibra de vidrio. Combinan la resistencia del metal con la ligereza del plástico, ideales para almacenar productos químicos agresivos.

Tanques de fibra de vidrio: la elección inteligente para un futuro sostenible

En el mundo de los tanques de almacenamiento, los fabricados con fibra de vidrio destacan por sus múltiples ventajas:

• Resistencia a la corrosión. Impenetrables al óxido y a la acción de productos químicos agresivos, garantizan una larga vida útil.
• Ligereza. Fáciles de transportar e instalar, reduciendo costos de logística y mano de obra.
• Aislamiento térmico. Mantienen la temperatura del producto almacenado, ideal para productos sensibles a cambios de temperatura.
• Superficies lisas. Impiden la acumulación de residuos y facilitan la limpieza.
• Seguridad. Fabricados en una sola pieza, minimizan el riesgo de fugas y derrames.
• Sostenibilidad. Fabricados con materiales reciclables, contribuyen a la protección del medio ambiente.

Recomendaciones para elegir el tanque de almacenamiento ideal

Al elegir un tanque de almacenamiento, es fundamental considerar los siguientes aspectos:

• Tipo de producto a almacenar. Asegúrate de que el material del tanque sea compatible con el producto que deseas almacenar.
• Capacidad requerida. Calcula la cantidad de producto que necesitas resguardar y elige un tanque con la capacidad adecuada.
• Condiciones ambientales. Considera la temperatura, la humedad y la exposición a la luz solar para elegir el material y el diseño adecuados.
• Presupuesto disponible. Establece un presupuesto y compara precios de diferentes proveedores.
• Garantía y servicio postventa. Elige un proveedor que ofrezca una garantía adecuada y un servicio postventa confiable.

La decisión final requiere una evaluación cuidadosa de tus requerimientos específicos. Recuerda que la inversión en un tanque de almacenamiento de calidad te garantizará una solución confiable, duradera y sostenible para el resguardo de tus productos.

En Hunter Composites nos especializamos en la fabricación de tanques de almacenamiento de fibra de vidrio, si requieres una cotización no dudes en contactarnos.